El oro subió a un nuevo máximo el lunes, continuando su impresionante rally en medio de la incertidumbre sobre las elecciones estadounidenses, las continuas tensiones en Oriente Próximo y los recortes de los tipos de interés por parte de los principales bancos centrales. Mientras tanto, la plata se disparó a su nivel más alto en casi 12 años.

 

El oro al contado subió un 0,6% y alcanzó los 2.735,75 dólares la onza. Los futuros del oro estadounidense subieron un 0,8% hasta los 2.751 $.

 

Gracias a la subida del oro, la plata al contado aumentó un 1,2%, alcanzando los 34,05 $ la onza, su nivel más alto desde finales de 2012.

 

"La situación actual del mercado incluye tipos de interés a la baja junto con elevados riesgos geopolíticos, condiciones que favorecen al oro en ambos aspectos", declaró Tim Waterer, analista jefe de mercado de KCM Trade.

 

Los inversores también reaccionaron a la noticia de que China redujo sus tipos de interés de referencia para préstamos después de recortar otros tipos de interés oficiales el mes pasado como parte de un paquete de estímulo para rejuvenecer la economía.

 

La demanda de oro en China, el mayor consumidor, se ha visto afectada por los altos precios y la ralentización de la economía.

 

En otros lugares, los operadores tienen en cuenta la probabilidad del 99% de que la Reserva Federal estadounidense reduzca los tipos de interés en noviembre. El Banco Central Europeo redujo los tipos de interés en un cuarto de punto porcentual la semana pasada.

 

Normalmente, unos tipos más bajos hacen que el oro resulte más atractivo, ya que los lingotes no devengan intereses. El oro también se considera una inversión segura en medio de la inestabilidad económica y política.

 

La contienda presidencial estadounidense de 2024 entre el ex presidente Donald Trump y la vicepresidenta Kamala Harris está muy reñida en los siete estados clave que determinarán el resultado de las elecciones del 5 de noviembre.

 

En Oriente Próximo, cientos de residentes de Beirut abandonaron sus hogares a última hora del domingo al oírse múltiples explosiones, mientras Israel se preparaba para atacar lugares vinculados a las operaciones financieras de Hezbolá.

 

En cuanto al oro, "2.800 dólares parece un objetivo alcanzable para finales de año... Podría haber motivación para asegurar algunas ganancias, desacelerando potencialmente las ganancias inmediatas", mencionó Waterer.

 

No obstante, predijo que los compradores probablemente estarían a la espera de oportunidades de entrada más favorables si se produce algún retroceso en el mercado.